Manhattan Sin Salida: Una sopa de clichés que no sabe mal

Crítica
Publicado: 18 Febrero 2020
Escrito por EJAH

La promocionaron como “la última producción de los visionarios directores de Vengadores: Endgame”, altamente esperada, y aunque no cumple con las expectativas generadas es una muy buena película de acción y misterio. Un policiaco como de los que hemos dicho que el cine grita hace rato por su presencia.

André Davis (Chadwick Boseman) es un detective en Nueva York que tiene la oscura reputación de asesinar a los criminales que persigue; una noche se le encomienda la misión de atrapar a unos fugitivos involucrados en un robo de cocaína en el que resultaron asesinados 7 oficiales de la policía; en una audaz estrategia para cortar su fuga, solicita que cierren los veintiún puentes de la ciudad de Manhattan (de ahí su nombre en inglés “21 Bridges”), tiene hasta el amanecer para completar la redada y atrapar a sus perseguidos. A medida de que vaya investigando, descubrirá que este caso está muy lejos de ser común y que nada es lo que parece.

Como dijimos anteriormente, nos vendieron esta película como si se tratase de una obra dirigida y producida por los hermanos Russo (los “visionarios” directores de “Capitán América: Guerra Civil”, “Vengadores: Infinity War” y “Vengadores: Endgame”) cuando en la realidad solo formaron parte del gran equipo de producción. El filme estuvo a cargo de Brian Kirk (director irlandés que ha participado en la dirección de algunos capítulos de clásicos de la televisión como “Dexter” y “Boardwalk Empire”).

Lidera el elenco actoral Chadwick Boseman (“Pantera Negra”) y cuenta con el lujo de tener en el reparto a J.K Simmons (“Whiplash”) y participan también algunas caras conocidas como Sienna Miller (“Stardust”), Taylor Kitsch (“John Carter”) y Keith David (“Crash: Colisión”). La actuación simplemente cumple, la calidad de Boseman y Simmons sobresalen del resto de los actores, aunque tampoco se trata de una de sus mejores interpretaciones.

manhattan sin salida escena del filme

La película es buena, cuenta con una fotografía impresionante (probablemente sean de las mejores tomas que haya tenido la ciudad de Nueva York) y el uso de las sombras y los enfoques de la cámara aportan tensión a las escenas. La música acompaña con exactitud las diferentes situaciones de la historia. Y la historia (aunque por momentos predecible o poco sorprendente) logra engancharnos.

La debilidad de la película es precisamente el descuido de detalles, por momentos se fuerzan situaciones y líneas de diálogos que lo que provocan es que uno ya imagine lo que vendrá a continuación. A excepción de alguna que otra escena, muchas de las situaciones principales (o tal vez la trama misma) por algunos diálogos ya se podían deducir totalmente.

Otro de los elementos que la debilitan y le restan calidad son los clichés como: las armas con munición infinita, persecuciones donde no nadie se cansa de correr, personas que chocan con un coche y con la misma se levantan y siguen corriendo, en fin, tampoco queremos hacer spoilers pero la verdad que tiene situaciones que le quitan seriedad al asunto.

A pesar de esto, la película logra capturar nuestra atención, la adrenalina nunca baja y aunque por momentos es predecible logran sorprendernos en algunos momentos claves. Como elemento técnico sobresale la fotografía.

Es una experiencia entretenida, supera en calidad y puesta en escena a la media de su género. A los amantes de los policiacos y persecuciones: les encantará. Al resto: nos conformamos con que no nos vendieron chatarra y disfrutamos la tarde-noche en el cine. Es un buen filme, recomendada

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